Mi voz en la hora menguada de la Republica

.Los momentos históricos son inequívocos, los acontecimientos sucesivos y desencadenantes conducen al desenlace final. El escenario y los  actores determinan las acciones que cambian el rumbo del momento y comienza a escribirse una  nueva historia.

La Venezuela de hoy presenta un rostro mallugado y desfigurado, sangrante y purulento, doloroso y sensible ante tanta barbarie e ignominia, ante tanta crueldad e insensatez  de quienes tienen  la responsabilidad de cuidar la cara de la república.

Es el momento de ejercer con dignidad la ciudadanía, de comportarse como republicanos y defender la soberanía, la constitucionalidad, la democracia y la justicia. Los necios se empeñan en aplastar a la mayoría, usurpan y maniobran la ley  con descaro, usan  las instituciones de justicia, a abogados y expertos tarifados que se  aferran a una letra para tratar de borrar los derechos democráticos de los venezolanos. Otros supeditan sus acciones a intereses subalternos y particulares, olvidando al común de la gente..   Hurgo en la historia y traigo a la memoria el pensamiento del fenecido personaje Alirio Ugarte Pelayo:

La República no puede ser un botín de un partido, la democracia no puede ser el empeño unilateral de un grupo, la constitucionalidad no puede ser producto del aplastamiento de unos venezolanos por otros, la libertad no puede ser un monologo de un sector por amplio que circunstancialmente aparezca, solamente la unidad en el derecho de todos los factores de la Nación permitirá el nacimiento y desarrollo  de una  legalidad indiscutida e indiscutible por cuya vigencia  puedan  jugarse la vida los  venezolanos de todas las tendencias“.

El puñado de personeros del régimen, quienes han perdido toda clase de autoridad y legitimidad, por la mala praxis gubernamental, en sus últimos suspiros para mantenerse en  el  poder a costa de lo que sea, han  sacado de la manga de la camisa .en complicidad criminal con el CNE, la convocatoria a una ASAMBLEA NACIONAL CONSTITUYENTE, llevándose en los cachos todos los principios y derechos democráticos que rigen la materia, en una especie de carmonazo de Maduro que le da un  golpe de  estado y barre el estado de derecho. Osadamente convocan una írrita e impopular Constituyente sin consultar al pueblo, se secan el sudor de la frente con la Constitución, se saltan de un plumazo los derechos del pueblo  consagrados en los artículos 70 y 71  sobre el  referéndum , la consulta popular  y el derecho  del pueblo a ser consultado  sobre materias de  especial interés, pisotean el artículo 5 que reza que la soberanía reside  intransferiblemente en el pueblo, de igual manera obvian el artículo 19 sobre el principio de progresividad  de los derechos humanos y con premeditación y alevosía rematan la violación constitucional con la interpretación fraudulenta, sesgada y parcial de los  artículos  347 y 348, confunden maliciosamente iniciativa de convocatoria  con poder de  convocatoria, le roban al pueblo el derecho a la consulta, la soberanía y le usurpan el poder de  convocatoria, toda estas arbitrariedades con la bendición y el  aval del TSJ. Lo que configura este  cuadro dantesco  de golpe de estado, de ruptura del  hilo constitucional y de atentado al sistema republicano.

Al muerto se le ve la sutura, una constituyente partidista, roja  rojita. Los candidatos impuestos a dedo, primero internamente, burlándose de las bases del PSUV y luego tratan de imponérselos al país con unas bases comiciales fraudulentas que le permiten amarrar la mayoría sin tener los votos y con casi el 90% de la población en contra. Una Constituyente que la rechaza internamente hasta el  chavismo democrático del  partido de  gobierno, pero sostenida por el  aparato comunicacional  y propagandístico del  madurismo con el  apoyo de las bayonetas y el presupuesto nacional.

¿Qué nos queda? Solo aferrarnos a los valores y principios democráticos, asirnos a la defensa de la dignidad nacional y a la lucha  por nuestros derechos elementales más naturales e instintivos de preservar  la vida, la libertad y por la supremacía de nuestros derechos humanos, nos queda defender la democracia con instrumentos constitucionales como  los  artículo 78, 333 y el 350, nos toca organizar la resistencia pacíficamente, nos toca construir la unidad del país desde los barrios, desde las catacumbas, estamos obligados a usar el consenso nacional construido en base a la constitución vigente y darle una salida democrática  al caos imperante, es preciso respaldar con firmeza y coraje a instituciones como la Asamblea Nacional y la Fiscalía General de la Republica que defienden la constitucionalidad.

Hemos llegado  a un punto en que  no  cabe más traición a la voluntad popular, este intento de constituyente fraudulenta marca un  hito histórico, que está pronto a convertirse en un desencadenante histórico  imprevisible, pero que va  hacer  reaccionar a la Venezuela democrática, al 90 % del país, que seguramente va defender la libertad y la democracia a costa de lo que sea.

Mi voz es para  llamar con angustia a la sensatez y a la reflexión de los factores del chavismo democrático, es el momento de las decisiones trascendentes, de tomar partido por la libertad y la democracia. legitimar esta bomba de tiempo  mal llamada constituyente, es coadyuvar  en la transformación del actual régimen madurista en una dictadura continuista, represiva, militar- cívica, que no tiene  nada que envidiarle a la dictadura militar-policiaca al peor estilo  de Pérez Giménez  y de otras  de igual calaña que se dieron en el cono sur de nuestra  América, No podemos  olvidar que hay miles de presos  políticos y  ya van 80 muertos, sin  contar los que mueren  día a día en manos del  hampa, o los que  mueren por hambre y desnutrición, y más grave aun los que mueren poco a poco, gradualmente por la tortura china del hambre, gota a gota , rebajando diariamente, kilo a kilo,  o por falta de medicamentos, eso es evidente, público y notorio en todos los barrios populares del país, cuna del chavismo.

En esta hora menguada de la Republica alzo mi voz a la conciencia  de miles y miles de compatriotas que se resisten  a ser un rebaño de  ovejas que siguen a un caudillo y sus adláteres  que los conduce inexorablemente a un despeñadero. Es la hora de la patria de verdad,  de la república, de los sueños de libertad, de las grandes decisiones, es el momento del desmarque, de colocarse del  lado de la consciencia nacional, de la razón, de la verdad y de la justicia, es el momento de  rechazar y combatir esta caricatura mal dibujada  de constituyente que busca el sometimiento de la mayoría y constitucionalizar la dictadura y su barbarie.

No es momento  de cálculos personales ni partidistas, es  tiempo de unidad nacional, de organizar y activar el poder constituyente originario  que reside en el corazón del pueblo, organizar millones de asambleas populares simultaneas en el país, declararse en sesión permanente, coordinar las acciones y   mover la fibra del sujeto popular, enfrentar la farsa desde el pueblo, los diputados, los académicos los  educadores, los dirigentes sindicales,  las amas de casa, los líderes sociales ,todos  los sectores deben convertirse en promotores y monitores del ejercicio verdadero del poder popular soberano y enfrentar los intentos dictatoriales, es ahora o nunca, demostremos de qué lado de la historia está el pueblo, hagamos nuestra la consigna “ ¡ solo el pueblo salva al pueblo¡ “ ,las  condiciones objetivas para el cambio y el progresismo están dadas, impulsemos las  condiciones subjetivas desde lo  más profundo del pueblo, estructuremos con acción, con dialogo y sinergia una visión compartida del país que soñamos todos los venezolanos.

 Jorge Rodríguez.