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USA 2016 – ¿Llegó un Chávez a USA?

Opinión
Artículos de opinión
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Tiempo de lectura: 4 min.

Visión Y Análisis
En el año 1.999 Venezuela vivió una elección presidencial dramática y con profundas consecuencias políticas, económicas y sociales que cambiaron la faz de nuestro país. Pienso que los Estados Unidos están viviendo una experiencia similar.
Para sustentar esa afirmación veamos los antecedentes.
En 1958 surgió una etapa política venezolana conocida como el período de Punto Fijo.
Tomo ese nombre por el pacto firmado por los principales partidos que iniciaron el proceso democrático en 1958. De este pacto y esos gobiernos surgieron una serie de gobiernos que dieron un fuerte impulso económico, político y fundamentalmente social a Venezuela; obras de infraestructura, escuelas, universidades, derechos políticos y sociales; Venezuela se convirtió en La Meca de los emigrantes de todo el mundo que venían a aprovechar las ventajas económicas y la democracia de nuestro país.
Sin embargo, a finales de la década de los 80, la crisis mundial afectó a los principales países industrializados, profundamente a China, originando una caída en los precios de las materias primas y por consiguiente una fuerte depresión económica y una gran deuda a Venezuela. Una gran parte de la población perdió sus empleos, se produjo descontento y la sociedad buscó nuevas opciones distintas a los partidos del Establishment.
Rafael Caldera, otro miembro del Pacto de Punto Fijo, y considerado centro derecha, dio una voltereta política y llegó a la presidencia alejándose de sus principios tradicionales y sostenido por un gran número de pequeños partidos de izquierda, prometiendo un gobierno de reformas y bienestar social. De alguna forma Caldera representó la última esperanza de la clase política surgida en 1958, pero el gobierno de Caldera no satisfizo las demandas de la sociedad, que volcó a elegir a un candidato distinto y ajeno al establishment venezolano.
Fue Hugo Chávez, auto definido como NO político, irreverente, no convencional, autoritario, decidido a romper tradiciones, reglas y leyes con tal de obtener y conservar el poder; así como generar una campaña de miedo y odio para aprovechar el resentimiento de la población desempleada y en la pobreza, así como aquellos con menor nivel cultural y más fácilmente manipulables con mensajes groseros, hasta obscenos, que le llevaron a dominar el escenario mediático.
El mismo escenario de hoy en los Estados Unidos. Las mismas crisis que afectaron a Venezuela afectaron a USA, Clinton logró alguna mejoría, pero los gobiernos de Bush enfrascaron a Estados Unidos en guerras en el Medio Oriente, que dejaron norteamericanos muertos y una sensación de haber sido engañados para participar en ellas. Además, la crisis del 2008 fue originada por fallas notables en las supervisión de las entidades financieras por parte del gobierno; crisis que tuvo que ser subsanada, en la medida de lo posible, con dinero de los contribuyentes para financiar a los bancos y produjo desempleo y crisis inmobiliaria, dejando a la población resentida contra el gobierno.
Llega Barak Obama, con promesas de reforma, es un afroamericano, eso motivó a los afroamericanos a tener una esperanza y votar por él en espera de mejoras en su calidad de vida, igual los latinos, prometió seguridad social, prometió derechos humanos, reforma migratoria, cerrar la cárcel de Guantánamo; en otras palabras, se convirtió en la esperanza de las minorías, de los liberales, de la gente de menores recursos, que veían en él alguien capaz de cambiar la situación existente (Si Podemos). Pero al final fue un presidente más “blanco” que Bush, no cerró la cárcel de Guantánamo, el Obamacare no solucionó los problemas hospitalarios, USA siguió en guerra en Afganistán y deportó miles de latinos indocumentados. Logró mejoría en la economía pero también dejó mucho desengañados.
Por estas razones el pueblo norteamericano ya no confía en los republicanos, por el desempeño de Bush, ni en los demócratas, por la desilusión con Obama, es decir, está lista para un outsider, un “no político”.
Se presenta Trump con el mismo estilo que Chávez, grosero, agresivo, con un mensaje de odio, resentimiento y miedo, emociones que en los actuales momentos dominan la sociedad norteamericana, dispuesto a romper tradiciones, quizás leyes para obtener el poder y mantenerse en él. Persona de ademanes y expresiones agresivas, se presenta como gran empresario, a pesar de que es la persona que más quiebras controladas ha realizado en los Estados Unidos en los últimos años, pero la realidad no importa, importa solo la percepción, y el domina la percepción, dice lo que la masa quiere oír, los norteamericanos adultos, blancos sin instrucción universitaria, fundamentalmente en los estados rurales, la gente más fácilmente manipulable.
El objetivo de este artículo NO ES predecir el resultado de las elecciones, sino explicar el fenómeno Trump, quien gane o no, ya es un fenómeno electoral, y sus enormes semejanzas con el proceso venezolano, con Hugo Chávez.
Tengo la esperanza de que si efectivamente Trump gana la presidencia, la clase política norteamericana logre poner freno a sus posibles decisiones arbitrarias e impida la destrucción de las instituciones políticas de los Estados Unidos, porque si eso ocurre sería irremisiblemente seguida por un deterioro de la situación social y económica de ese país.
Dejo a su disposición un artículo sobre este mismo tema publicado en diario El Aragüeño en noviembre del años 2011
https://visionyanalisis.blogspot.com/2011/11/un-chavez-para-usa.html?view=flipcard
Martes 08 de noviembre de 2016