Este encuentro no solo representa un paso fundamental hacia la unidad de profesores, administrativos, obreros, personal profesional y estudiantes, sino que también marca una nueva etapa en la incansable defensa de la universidad y sus derechos.
La academia en Venezuela, a pesar del notable desempeño de sus egresados en el exterior, enfrenta desafíos considerables. En el pasado, nuestras casas de estudio se destacaron entre las principales de la región, incluso a nivel global.
La afirmación de que los pensionados y jubilados en Venezuela están "condenados a muerte" por la crisis económica de los últimos 25 años es una expresión muy fuerte que refleja la extrema vulnerabilidad y las severas dificultades que este grupo ha enfrentado.
Muy emocionada, andaba Mary Kory, no paraba de cantar el coro de una de las famosas canciones de Tito Rodríguez que decía así: “Vuelan las palomas en su palomar / y vuelan que vuelan para no tornar”.
Mi primer encuentro con Luis Herrera Campíns fue en el mes de mayo de 1975 cuando visitó el Velódromo "Teo Capriles" para solidarizarse con la huelga de los entrenadores deportivos que en ese momento reclamaban su derecho laboral a la contratación colectiva ante el Instituto Nacional de Deportes.
El "8 de mayo" quedó establecido oficialmente como el “Día del Entrenador Deportivo” en reconocimiento a la gesta que se había librado durante toda esa semana, ya que en esa fecha alcanzó la solución a las demandas laborales requeridas por los entrenadores en ese momento.
El mundo entero, no salía de su asombro, al conocer la noticia de la detención ¡¡¡ de una nevera!!! en la ciudad de Maturín, estado Monágas, Venezuela.
En el contexto de las protestas laborales en Venezuela, especialmente en los últimos 25 años (2000-2025), "el hueso" se ha convertido en un poderoso y crudo símbolo utilizado por los trabajadores, sobre todo del sector público como maestros, personal de salud y jubilados.
Frente a las agresiones que a diario sufre el sector educativo por parte del régimen, los obreros, empleados, estudiantes y maestros decidieron darle un contenido social de protesta pacífica y democrática a los actos de la conmemoración anual cristiana de la Pasión, Muerte y Resurrección de Jesús de Nazaret.