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Opinión

Maxim Ross

La suerte política de Juan Guaidó está en juego y con la de él la de toda Venezuela, lo que me trae a la memoria aquella famosa novela de Ernesto Sábato “Sobre Héroes y Tumbas” porque el nombre dice todo de como construimos un héroe y, rápidamente, lo bajamos de su pedestal. Este juego, en el caso de Guaidó lo considero bien riesgoso porque nos estamos jugando la última carta para salir del atolladero histórico en que estamos.

Digo que lo respaldo, porque creo que ha acumulado suficientes activos políticos, como ningún líder de la oposición venezolana lo ha hecho hasta ahora. Primero, por los datos de popularidad que publican las encuestas que ya es decir mucho, para quien tiene una andanada de críticas encima.
Como si fuera poco eso, ha logrado unificar a la oposición venezolana, porque aun cuando se producen disidencias tácticas o pasajeras sobre la ruta escogida, sigue encabezando el liderazgo opositor, lo cual le genera otro activo tangible que se traduce en dos claramente visibles: es el único interlocutor del gobierno y, hasta ahora, intocable. Obviamente, no se trata de la obra de un solo hombre porque allí también están otros valiosos líderes, sin cuyo apoyo y reconocimiento a su liderazgo, no estaríamos donde estamos.

Como si fuera poco ha logrado conformar, como nunca, una coalición internacional en su respaldo de, al menos 60 países, los cuales de extremo a extremo y con sus variantes lo reconocen y respaldan un cambio político en Venezuela, cierto, de distintas formas, pero el apoyo sigue en pie.
Por si fuera poco, ha logrado, con el concurso de muchos, crear un Estado paralelo. Nada más y nada menos. Quizás un caso único en la historia de las rebeliones anti gobiernos, cuando varias de ellas terminaron solo en el exilio.

Un activo, probablemente desapercibido es que, sin saberlo y sin decirlo, estamos en una transición quiera o no el gobierno y sus lideres actuales, porque sea por la vía de una genuina negociación, de la llamada “implosión” o de un severo agravamiento de la situación social, lo cierto es que el país sabe y comprende que así no podemos continuar. Que una transición es indispensable.

Quizás exagero con todo lo dicho y no le hago descuentos a Guaidó, pero tiene una característica que esconde su mayor activo político: sencillez de lenguaje y capacidad comunicadora las que, seguramente, provienen de su origen humilde. Es un hombre del pueblo.

Por todo eso digo que no podemos abandonarlo ahora.

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Jesús Elorza G.

El pasado jueves 15 de agosto, el comentario generalizado entre atletas, entrenadores y dirigentes deportivos estaba relacionado con la creación de una comisión presidencial para atender todo relacionado con la logística para la delegación que nos representará en los próximos Juegos Olímpicos Tokio 2020.
El usurpador Maduro, anunció que “He decidido designar una comisión presidencial Tokio 2020 para que revise todo el plan de atención, entrenamiento, apoyo, logística de nuestros deportistas y atletas que van rumbo a las Olimpiadas”, agregó que la misma estará conformada por los ministros del Poder Popular para el Despacho de la Presidencia, Jorge Márquez; para la Juventud y Deporte, Pedro Infante, y de Economía y Finanzas, Simón Zerpa. Yo quiero que el 30 de agosto hagamos una reunión para que me expongan el plan, la ruta, los recursos, desde el día 1° de septiembre al día que lleguemos a Tokio 2020”. También, agregó que siete atletas deben sumarse a esta comisión.

- Tarde piaste pajarito, comentó uno de los atletas. Desde los juegos de Río 2016 hemos venido solicitando los recursos necesarios para nuestra preparación y las autoridades no le prestaron la más minima atención a nuestros reclamos.

- Dígame eso, señaló uno de los entrenadores, que coño vamos a esperar de esa comisión si quienes la integran son los responsables directos del Desastre Panamericano que acaba de ocurrir. Me refiero en particular al ministro del Deporte. O sea, Maduro en su populista anuncio, premia al incapaz Ministro del Deporte integrándolo a la referida comisión….no me jodas.

- Un basquebolista, interviene para decir que ese anuncio son palabras vacías que se las llevará el viento. No se les olvide que en el año 2015 la selección nacional Vinotinto de mi deporte ganó el Preolímpico de Baloncesto y al igual que hoy Maduro anunció una Comisión Presidencial presidida por Mimou Vargas para atender todo lo referido a la preparación de la selección con miras a los Juegos Olímpicos…Bueno, a cuatro años de ese anuncio, la comisión no se ha reunido por primera vez…se volvió pura paja.

- Tiene total y absoluta razón el basquebolista, dijo un dirigente. Allí esta el caso de la selección varada en Italia, sin haber cobrado los viáticos los jugadores, sin recursos para pagar los hoteles y con un entrenador de apellido Duró que se ha transformado en “Blanditó” frente a los reclamos de los jugadores que decidieron no continuar con los entrenamientos hasta tanto no les resuelvan sus reclamos. Creo importante señalar que Anthony Coello a como responsable plenipotenciario de la delegación es un funcionario de gobierno, es decir, otro comisionado pura paja.

- Esa comisión recién nombrada, debería comenzar por resolver los problemas de la selección de baloncesto. ¡¡¡En quince días comienza el mundial en China!!! Pero, no me hago ningún tipo de ilusiones…llegará Tokio 2020 y de no cambiar a este régimen todo seguirá igual o peor: Instalaciones inservibles, atletas sin seguridad social integral, entrenadores con salarios de hambre, federaciones intervenidas y bozaleadas, autoridades deportivas centradas en actos de corrupción y el régimen nombrando comisiones que solo servirán para anunciar públicamente que la guerra económica del imperialismo y el bloqueo ordenado por Trump son los causantes del desastre deportivo.

- Una atleta que estudia Ciencias Políticas en la UCV, intervino para señalar que en los regimenes populistas y dictatoriales es muy común la designación de comisiones para el tratamiento de los problemas. Pero, la historia nos ha demostrado que “Si queremos que todo siga como está, nombra una comisión”. En otras palabras, el anuncio del régimen no pasa de ser “Una Comisión Olímpica Gatopardiana”
Al final, la conclusión a la que arribaron todos los presentes fue, que “Un cambio para ser real y democrático requiere el cese del régimen usurpador, un gobierno de transición y lielecciones libres”.

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Aragua en Red/ASTA/Punto de Encuentro/Médicos Unidos Venezuela-Aragua

Manifiesto de los ciudadanos de Aragua a la dirigencia política democrática:

dirigentes nacionales, secretarios generales, diputados a la Asamblea Nacional y demás integrantes de las agrupaciones políticas y a las organizaciones sociales, sindicales, empresariales, académicas y a todas las fuerzas democráticas de país, a quienes mencionamos a continuación en estricto orden alfabético:
Nombre Organización Política
Andrés Velázquez La Causa R
Henry Ramos Allup Acción Democrática AD
Antonio Ledezma Alianza al Bravo Pueblo
Irán Gaviria Partido Unión y Entendimiento PUENTE
Claudio Fermín Soluciones por Venezuela
Juan Pablo Guanipa Primero Justicia
Campos Alfonso Movimiento Esperanza por el Cambio
Leopoldo López Voluntad Popular
Delsa Solórzano Encuentro Ciudadano
Manuel Rosales. Un Nuevo Tiempo
Eduardo Fernández IFEDEC
María Corina Machado Vente Venezuela
Enrique Salas Römer Proyecto Venezuela
Mercedes Malavé Partido Demócrata Cristiano COPEI
Felipe Mujica Movimiento al Socialismo MAS
Nicmer Evans Mov. por la Democracia y la Inclusión
Freddy Castellanos PROCIUDADANOS
Omar Ávila Unidad Visión Venezuela
Gabriel Puerta Aponte Bandera Roja
Rafael Venegas Avanzada Popular
Henri Falcón Avanzada Progresista
Simón Calzadilla Movimiento Progresista Venezolano
Henrique Capriles Primero Justicia
Timoteo Zambrano CAMBIEMOS Movimiento Ciudadano

“Un buen líder puede participar en un debate de forma honesta y minuciosa sabiendo que lo importante al final es que ambas partes estén más cerca que antes, y sean por ende más fuertes. Esto no sucede cuando se es arrogante, superficial o se está desinformado”.

Nelson Mandela

Los ciudadanos que refrendamos este texto, miembros de la sociedad civil, independientes o con militancia política, somos la expresión de la diversidad social y de pensamiento que nos define como sociedad, que habitamos y vivimos esta tierra de todos y para todos. Somos sufrientes de una realidad inducida, de manera mal sana, por unos agresores que parecen disfrutar del padecimiento de la ciudadanía venezolana que ya está harta de la amenaza constante, de la desesperanza, del odio, del miedo, de la ausencia y del hambre.
Pero también está harta de la inhabilidad de quienes nos representan y su incapacidad para ponerse de acuerdo. Queremos expresar nuestra profunda preocupación y malestar ante la confrontación de los líderes y factores de la oposición frente a la manera como debe lograrse la ruta trazada del cese de la usurpación.
La situación es apremiante y exige el mayor tratamiento ético y moral, que conduzca a la construcción de un Acuerdo Nacional, Lo que vemos los ciudadanos es una diatriba permanente, acusatoria, denigrante e innecesaria, fomentando la consolidación de la pérdida de confianza, el desprendimiento de los valores institucionales que representa la democracia y la convivencia, la desarticulación social, entre otros factores consecuentes.
Lo peor es que esa diatriba ha bajado a la base social, a los ciudadanos comunes, radicalizando a algunos, encontrando insultos de todos los calibres entre opositores, cuando deberíamos estar invirtiendo tiempo y energía en enfrentar la ilegitimidad instalada en Miraflores. Así que las descalificaciones directas, indirectas o por mampuesto de los principales dirigentes políticos, tiene a los ciudadanos ocupando su tiempo en luchas estériles contra sus hermanos.
El resultado de tanto desatino no achacable al régimen, desde el punto de vista emocional es frustración, desesperación y desesperanza; pero desde la óptica política la consecuencia es el descrédito de los partidos políticos y sus dirigentes.
Menos mal no son todos y aún quedan quienes apuestan por hablarle directamente a la ciudadanía y al igual que el presidente Güaidó, ponen el pecho al sacrificio por la libertad y la República. Aupamos a quienes promueven la discusión política de altura, sensibilizada, sin divinismos ni show, sin la garra por el poder, pero si con el objetivo de una Venezuela Libre para siempre, la Venezuela mejor, la Venezuela que viene.
Sin dudas debemos discutir y, ¿Por qué no?, batirnos apasionadamente por las alternativas en la que cada uno cree es la ruta propuesta por la visión democrática, pero con el objetivo vital de acercar posiciones, porque así lo demanda el sufrimiento y la muerte de millones de venezolanos. El deber ser en este momento es llegar a ACUERDOS, revisando todas esas opciones que están sobre la mesa.
Pero lo que vemos los ciudadanos son declaraciones genéricas, diluidas en explicaciones superficiales carentes de los impactos que sobre la vida ciudadana se generarían. Vemos discusiones aderezadas de descalificaciones hacia quienes piensan diferente en el propio campo opositor. La verdad es que TODOS queremos que salgan ya, pero quienes tienen la responsabilidad de alumbrar el camino pretenden imponer su criterio sin argumentar, sin señalar el cómo y, pareciendo que solos lo pueden lograr.
En otras palabras, el problema para cambiar y progresar no son los secuestradores de la patria, sino los venezolanos que estamos en la acera contraria, que no hemos estado a la altura por ignorancia (unos) y por incapacidad (otros), siendo la principal responsabilidad la de quienes tienen que trazar el camino: la dirigencia política a quienes está dirigido este manifiesto.
Otro seria el resultado para bien de los venezolanos, si se pusieran de acuerdo aquellos que aspiran a dirigir los destinos del país y los viéramos señalando el mismo camino, igual propósito e idénticas acciones. Para que ello ocurra, para que se salve la patria, es menester que se sienten, dialoguen, argumenten, y lleguen a acuerdos. En pocas palabras, lo que les estamos pidiendo es que hagan política y no abran la puerta a la anti-política.
Por esta razón, le proponemos y exigimos a la vez, que entre TODOS los factores democráticos se establezca un sincero DIALOGO Y NEGOCIACIÓN, para concertar la manera de hacer efectiva la salida del régimen, viendo y analizando todas las aristas de la acciones propuestas en la ruta democrática; que son múltiples, complejas y riesgosas; para lo cual se deben dejar de lado momentáneamente las aspiraciones de cargos de elección popular, momento que llegará mucho más temprano si se hace lo que proponemos.
Una vez concertado ese camino de la liberación, se debe acordar una GRAN PACTO NACIONAL sobre la Venezuela que no solo conquista la libertad, sino que da estabilidad y garantiza el progreso y las oportunidades para todos. El destino de la república está en nuestras manos. Perderla es la muestra de nuestras incapacidades ciudadanas y democráticas.
Este gran acuerdo tiene la necesidad y urgencia de quienes ya no aguantan más. Es la vida ciudadana la que clama lo que aquí pedimos. Es la verdad y la salvación de todos lo que marca el momento. Por lo tanto debe tener lugar a la BREVEDAD, y debe contar con la veeduría de la sociedad que cree en las instituciones democráticas. Invocamos los máximos valores políticos para que esta exigencia se haga realidad. La iglesia, la academia y el Presidente Juan Güaidó deben ser garantes de la concertación. Es posible ponernos de acuerdo.
Es pertinente señalar que esta gran pluralidad de visiones políticas que firmamos este documento, reconocemos y apoyamos como Presidente interino y líder en este momento de dificultades a Juan Güaidó, por su entereza, visión política e inteligencia ante tan compleja situación llena de riesgos, como la actual.
Por Venezuela, por los venezolanos, es el momento de tener el valor de sentarnos con nuestros adversarios internos, con todos los que están en la acera contraria al régimen. Juntos saldremos mucho más rápido de esta tragedia y podremos comenzar a convertir a Venezuela en referente mundial del país que renació de las ruinas y sentó sus bases de desarrollo, convertida en símbolo de la paz, justicia y de oportunidades para todos.
Esperando pronta respuesta expresada en el acercamiento y la concertación, quedamos de ustedes, atentamente:

Aragua en Red / Alianza Sindical de Trabajadores de Aragua -ASTA-/ Punto de Encuentro / Médicos Unidos de Venezuela- Aragua

Maracay, 16 de Agosto 2019

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La educación debe formar ciudadanos, no empleados

Fernando Sabater

Filósofo y autor español

Un ciudadano goza de los derechos y está sometido a las obligaciones que las leyes del Estado establecen para quienes poseen la condición de ciudadanía. El ciudadano tiene el derecho y el deber de participar activamente en las decisiones de los asuntos que conciernen a sus vecinos y conciudadanos, desde el ámbito local al nacional; por lo tanto, es muy importante que se tengan los conocimientos y capacidades necesarios para tal fin. De ahí la necesidad de la Educación Ciudadana, que pone al alcance de los ciudadanos la información y destrezas que les permitan participar en los asuntos que corresponden a las relaciones, normas de convivencia y organización ciudadana.

Al elaborar los programas formales de formación sobre educación ciudadana, hay temas que necesariamente deben ser considerados, tales como: Instituciones del Estado de Derecho, los Poderes Republicanos, la Constitución Nacional y su importancia, la democracia como sistema de gobierno, la necesidad de la organización social, formas de participación y representación ciudadana, los derechos civiles y los derechos políticos, valores humanos, los principios éticos como normas de conducta, la justicia y la libertad como virtudes esenciales, la tolerancia, desarrollo del pensamiento crítico e independiente, los valores humanos como normas y principios de comportamiento.

Para lograr mejores resultados, la educación ciudadana debe estar integrada al sistema de educación formal. Los programas y actividades deben estar presentes en los planes de educación primaria, media y superior, en sus diferentes niveles. También pueden integrarse en los planes de estudio mediante ejes transversales.

Sin embargo, en los intentos que se han hecho para incorporar la educación ciudadana a los planes de estudio, se han encontrado diferencias entre los contenidos propuestos y lo que realmente se ejecuta; así mismo, se han podido evidenciar sesgos político – ideológicos. Es necesario estimular el interés y entusiasmo de los participantes en estos programas de estudio, principalmente de los niños y adolescentes. El aprendizaje ciudadano también se nutre de la educación familiar y la tradición cultural.

La participación ciudadana puede incluir desde trabajos comunitarios, de servicio social y supervisión de servicios públicos, hasta la intervención en procesos de elección de autoridades locales, regionales y nacionales, de manera individual o mediante organizaciones de la sociedad civil. También la supervisión y contraloría de la gestión de gobernantes y funcionarios públicos, para evitar malas decisiones o prácticas deshonestas. La educación ciudadana propicia que el ciudadano se convierta en agente de cambios positivos para la comunidad nacional; el gobierno, en representación del Estado, debe afrontar el compromiso de fomentar la formación ciudadana, sin injerencias ni ventajas de tipo político – partidista.

Una manera de mantener a raya a los aventureros de la política y los demagogos oportunistas, de frenar la corrupción administrativa y los gobiernos “de facto”, es tener una estructura institucional democrática fuerte, con poderes republicanos independientes y promover el respeto por la Constitución, las leyes y las normas de convivencia. Muchos de los problemas que hemos tenido en Venezuela se relacionan con un insuficiente nivel de civismo de la población, la generalizada tendencia al irrespeto e incumplimiento de las leyes, la inclinación en algunos sectores de la población por la antipolítica y la perniciosa influencia del militarismo.

Es fundamental tener un sistema educativo que le dé la importancia debida al tema de la educación ciudadana, para poder contar con ciudadanos responsables, capacitados para defender los intereses colectivos y participar en la vida social y política del país. Un pueblo educado en el ejercicio de la ciudadanía, sin duda contribuirá a propiciar la existencia de más y mejores organizaciones de la sociedad civil, que contribuirán a que se fortalezca la institucionalidad republicana y al respeto por el cumplimiento de las leyes como un valor determinante del comportamiento cívico. Es más difícil embaucar a una ciudadanía consciente y activa que a la masa popular a la que suelen apelar los políticos populistas. Una democracia sólida, con un gran respaldo ciudadano, puede ser un escudo contra gobiernos autoritarios, intentos de golpe de Estado y la pretensión de instaurar regímenes militares, que tanto daño han causado a nuestro país.

Profesor, Facultad de Agronomía, UCV
felipeedmundo@gmail.com

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Con voz propia

“El pueblo de América y el resto del mundo se están engañando si piensan que el actual gobierno de Venezuela es democrático”. Los jefes de la intentona del 4 de febrero (1992) dialogaron con el periodista Ralph Schusler, corresponsal de EEUU, a quien le afirmaron que el golpe falló “por no tomar los medios de comunicación social”. El texto es el encabezado al reporte de Economía HOY, uno de los primeros impresos desaparecidos en régimen que insurgentes asumieron por vía electoral.

“El pueblo de América y el resto del mundo se están engañando si piensan que el actual gobierno es democrático…Lo que tenemos aquí es dictadura partidista y de grupos que tienen intereses especiales”. Son expresiones del líder golpista Hugo Chávez en su prisión en el Cuartel San Carlos, donde dio la entrevista “rodeado por miembros de su acción y parientes de los otros oficiales que comparten segundo piso” de la prisión.

Varias divisiones de las FAN –acusa- estan convertidas “en guardias pretorianas, al proteger a un gobierno que sirve a los intereses de un pequeño grupo que actúa en contra de los intereses del pueblo”.

Como conclusión de sus jergas justificó la asonada en artículo (entonces 250, hoy 350) de la Carta Magna “que estipula rectificar sus violaciones, en especial en la malversación de fondos que, desde todo punto de vista, ha sumido proporciones epidérmicas en Venezuela”.

“En tal eventualidad –precisaba-, todo ciudadano, investido o no de autoridad, tiene el deber de colaborar en restablecimiento de efectiva vigencia de la Constitución Nacional”.

No olvidar que en materia de leyes supremas Venezuela es pionera de las hispanoamericanas con la promulgada en 1811. Esta recibió la directa influencia de la estadounidense. En su doctrinario discurso del Congreso de Angostura el Libertador dijo de EEUU que “es único en la historia del género humano, que un sistema tan débil y complicado como el federal, haya podido regirlo en circunstancias tan difíciles y delicadas”

Francisco de Miranda, Precursor de la Independencia Americana, en el inicio de nuestra emancipación zarpó de Nueva York el 2 de febrero de 1806, en la corbeta Leander.

Hubo bloqueo entre fines de 1902 y principios de 1903 cuando marinas de guerra de los Imperios Británico y Alemán y el Reino de Italia ​franquearon costas y puertos en exigencia del pago de deudas contraídas con las compañías de sus connacionales. Tal bloqueo finalizó con el Protocolo de Washington firmado el 13 de febrero 1903 con la medición de EEUU.

Reactualizada queda la proclama del Gral Cipriano Castro: ¡La planta insolente del Extranjero ha profanado el sagrado suelo de la Patria!

La presión logró el objetivo político.

“Abro las puertas de cárceles para detenidos políticos; y las de la Patria para los que por iguales razones se encuentren en el Extranjero y restituyo garantías constitucionales y las propiedades de todos”.

Más todavía: renuncia a la Presidencia de la República, para salud de la Patria.

“Estoy listo a mi separación a la vida privada. Podéis estar seguros de que me retiraré satisfecho sin las nostalgias del Poder, porque mi aspiración mayor es ver a mi Patria grande, próspera y feliz”.

Ahora Donald Trump decretó el bloqueo de bienes del régimen usurpador en EEUU.

«¿Qué poder tiene EEUU para imponer bloqueos y sanciones? -expone el usurpador régimen en la ONU.

Dicho bloque no es sólo EEUU. Fue el primero de más de 50 países que desconocen a narcos estafadores apadrinados por militares. Se destacan Canadá y más reciente Suiza. Que se vayan narcoestafaores y que se le peguen atrás sus lacayos. La Justicia se impondrá

Al MARGEN. A 300 llegan militares presos y torturados del Gral Mindefensa Vladimir Padrino a quien la auto asilada Luisa Ortega ofrece alianza de oposición con evidencia mala intención divisionista. No se incluyen crímenes, como el del capitán Rafael Acosta Arévalo. Jordanalberto18@yahoo.com

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Edgar Benarroch

La crisis que padece el país por la desastrosa gestión de este régimen usurpador y que nace hace veinte años es de proporciones no conocidas por mi generación . La crisis es general, social, económica, política e institucional . Ella para superarla requiere de la oposición unidad, inteligencia, solidaridad y toda la voluntad posible. El régimen plantea la política en un terreno árido y obscuro donde nosotros nunca debemos descender, para él todo es válido y cualquier camino es bueno, más que camino trochas y montarrales, para nosotros que no concebimos la política sin ética, sin moral, sin tolerancia y sin diálogo el terreno no es ese. La obscuridad se combate con luz, mientras más espesa es la obscuridad mayor debe ser el brillo de la luz. Hay quienes movidos por la angustia y desesperación proponen vías heterodoxas para salir de este desastre, para nosotros las vías posibles son las democráticas y en ellas debemos mantenernos en la seguridad que tras la obscuridad de la noche, que ya es bastante larga, siempre estará brillando el sol de la mañana.

Nuestro deber irrenunciable es continuar con nuestras limpias banderas en la lucha con la convicción que serán izadas en la cúspide de la nación y allí estarán flamantes en la inmensa tarea de la reconstrucción nacional.

La estrategia diseñada por la oposición ha dado muy buenos frutos y hoy el régimen más solitario no puede estar, carece del calor y de todo el respaldo popular y esta sostenido exclusivamente por las bayonetas administradas por el Alto Mando de la Fuerza Armada, recalco lo del Alto Mando porque en la inmensa mayoría de los cuarteles también está presente el deseo de cambio, ellos son parte del pueblo y padecen y sufren como todos. Saben de las de las constantes violaciones a la Constitución y del desconocimiento de los Derechos Humanos, también de la persecución, encarcelamiento, tortura y hasta asesinato de quienes piensan y actúan distinto. Solo la férrea disciplina y obediencia a "todo evento" los mantiene en silencio. No sólo existe un severo cuestionamiento interno sino que también en todas las naciones del mundo está presente la preocupación y desaprobación de la gestión de este régimen que se ha transformado en un serio problema internacional. Todos los organismos internacionales se han pronunciado por una pronta salida de esta gravosa situación y más de sesenta naciones reconocen en el Presidente de la Asamblea Nacional, Diputado Juan Guaidó el Presidente encargado de la Republica. Nunca habíamos atravesado por un aislamiento mundial como el presente, qué vergüenza.

Es profundamente conocida y sufrida por el pueblo la horrorosa situación nacional y entrar a inventariarla nuevamente sería llover sobre mojado. Remacho en estas líneas el irreversible deber de la oposición de mantenernos en el camino democrático, si somos demócratas y nuestra lucha es por restablecer la democracia, la libertad, la justicia y la prosperidad , debemos actuar como tales.

Cristo nuestro Señor entregó su existencia en la tierra y aceptó ser sometido a inclementes torturas y a la crucifixión por la salvación de la humanidad, nunca recurrió a dar la pelea en el terreno que la autoridad romana planteaba pudiendo hacerlo con absoluto éxito .Hasta moribundo en la cruz pidió perdón para quienes lo persiguieron y asesinaron. Claro está, esa fue la voluntad del Padre pero también el tamaño de sus convicciones, recordemos que Jesus también fue humano. La palabra, la verdad y su testimonio fueron sus armas. No es exigible que nos inmolemos pero si la entrega total a la lucha que adelantamos que es por el presente y futuro mejor de todos, especialmente por los débiles y necesitados.

Tenemos la alegría y emoción que está lucha la estamos dando por la verdad, la justicia y la libertad y ella con nuestra convicción de servicio triunfará.

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Santiago Montenegro

El pasado viernes, antes de detallar las conclusiones de la Misión del Mercado de Capitales, que él dirigió, el profesor Roberto Rigobón, del MIT, hizo uno de los preámbulos más conmovedores que jamás he escuchado. Frente al presidente Duque, el ministro de Hacienda y buena parte de los dirigentes de la economía, el profesor Rigobón contó que había llegado al mundo en uno de los barrios más pobres y violentes de Caracas, que era hijo de un taxista argentino, que apenas había realizado estudios de primaria, y de una costurera española, quien ni siquiera había terminado la primaria. Varios factores explicaban una parábola vital que, muchas décadas después, lo situarían a él frente a esa audiencia del hermano país. Primero, el amor y la decisión de unos padres por sacar su familia adelante, en un país que les abrió sus puertas y acogió también a centenares de miles de inmigrantes venidos desde diferentes partes del mundo. Porque Venezuela fue una sociedad abierta en donde, pese a sus innumerables problemas, con trabajo y dedicación era posible salir adelante y progresar. Segundo, porque Roberto Rigobón y su hermano lograron estudiar gracias al ahorro de sus padres y con empréstitos del sector financiero. Pero el tercer gran mensaje del profesor del MIT estuvo referido a Colombia. Dijo que tenía que aprovechar la oportunidad de hablar frente a esos testigos de excepción, encabezados por el jefe del Estado, para agradecer a nuestro país. Todos los venezolanos, afirmó, estaremos eternamente agradecidos con Colombia por haber abierto sus puertas para acoger a centenares de miles de venezolanos, obligados a tomar el camino del exilio para poder sobrevivir y escapar de las consecuencias abominables de un régimen dictatorial. Porque en Venezuela, dijo, sabemos lo que es acoger a los inmigrantes extranjeros, porque es parte de mi historia personal, quiero darles las gracias desde lo más profundo de mi corazón. No exagero al decir que, como respuesta, pocas veces había escuchado un aplauso más largo y atronador. Quizá porque tocó unas fibras muy sensibles de nosotros.

Por varias razones. Primero, porque dijo algo bueno de Colombia, un país en el que, desde hace décadas, muchos de sus intelectuales y analistas solo han argumentado que somos la historia de un fracaso tras otro. Segundo, porque habló de una actitud que es factualmente cierta y que se ha dado en todos los niveles. Desde las numerosas medidas del gobierno del presidente Duque para asistir a los inmigrantes y, por supuesto, por haber roto relaciones con el régimen criminal de Maduro, hasta la ayuda palpable que les ha prestado a nuestros hermanos venezolanos gente de todas las condiciones, hasta las más humildes, en las ciudades, en las carreteras y en las estaciones de buses. Pero quizá lo más notable es que, hasta ahora, ningún partido o movimiento se ha embarcado en una campaña xenófoba y nacionalista para explotar políticamente la inmigración, como sí ha sucedido en otras partes. Aunque lo nieguen los miembros de la escuela de la “fracasomanía”, esa actitud es consistente con una tradición republicana, liberal y pluralista que, esperemos, jamás la abandonemos.

Gracias por sus palabras, profesor Rigobón. Pero el agradecimiento es nuestro, porque jamás olvidaremos que, durante décadas, Venezuela acogió también a centenares de miles de colombianos, que viajaron a la tierra del “bravo pueblo” en busca de mejores oportunidades.

1 de agosto 2019

El Espectador

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