ENFRENTAR LA INFLACIÓN
Si aumenta la cantidad de dinero que hay en una economía, crece la demanda de productos más rápidos que la oferta y en consecuencia esa presión produce que los precios de bienes y servicios suban y se inicia la inflación.
La mejor y adecuada manera de combatir la inflación es estimular la producción de los bienes y servicios hasta un límite que, si es posible, rebase la demanda. Estimulando la producción se deben implementar políticas efectivas para mejorar hasta donde sea posible la productividad, que consiste en lograr que una unidad produzca más cantidad de bienes. Todo ello controlando la masa de dinero en circulación pública. Otra medida, algo drástica, es aumentar el tipo de interés de manera de disminuir el dinero en circulación, bien porque hay que pagar más por intereses o porque se solicitan menos préstamos.
Mundialmente ha aumentado la inflación por los precios de los alimentos y la energía alcanzando máximos históricos. Ese aumento ha sido impulsado por la demanda de los consumidores tras la pandemia y la invasión rusa de Ucrania.
En Venezuela tenemos una inflación que alcanzó ser la más alta registrada en la historia de la humanidad, si hoy en algo ha disminuido se mantiene en 1.600% interanual, que es la más alta de Latinoamérica y el Caribe. Todo ello por el abandono y persecución irracional hasta la reducción de la producción nacional y por la inmensa masa de dinero en circulación que de manera inorgánica la irresponsabilidad de este régimen lanza a la calle; en fin. por una política monetaria absolutamente disparatada y equivocada.
Existe inflación por exceso de demanda o por baja oferta. En nuestro caso operan las dos, porque el pueblo cada vez exige más para su mantenimiento y desenvolvimiento y porque no encuentra o no puede lograr lo que busca. Con la inflación se distorsionan los precios, es muy difícil distribuir los ingresos, planificar las compras, pagar las deudas o invertir en algo rentable, porque también contrae la inversión.
Los perdedores con la inflación somos todos, pero especialmente los asalariados y los menos pudientes y los ganadores son los que perciben las ganancias de capital. Todos debemos destinar mayor cantidad de dinero de nuestro ingreso para el consumo y mantenimiento y el que menos ingresos tiene, el pobre, sufre con mayor inclemencia este mal. Paremos cuanto antes este desastre y sabemos que en UNIÓN lo lograremos más temprano.
LUIS PASTORI, EL CONOCIMIENTO Y LA POLÍTICA
El pasado jueves se cumplieron 101 años del nacimiento de Luis Pastori, como bien se deduce nació el 25 de agosto de 1921 en La Victoria, Estado Aragua y falleció en Caracas el 2013. Con motivo de recordar este aniversario de su natalicio y con ánimo de honrar su memoria, redacto esta nota.
Fue economista, académico, periodista, compositor y poeta de fina prosa. Fue vicepresidente del Banco Central de Venezuela, donde laboró por más de treinta años, Ministro de Estado para la Cultura, presidente de la Asociación de Escritores de Venezuela y coautor, conjuntamente con Tomás Alfaro Calatrava, de la letra del himno de la Universidad Central de Venezuela,” La casa que vence la sombra”; la música es del insigne maestro Evencio Castellanos.
Fue del "staf" periodístico del célebre "Morrocoy Azul" durante la década de los cuarenta. Este periódico estaba concebido con mucha gracia y buen y fino humor, con anécdotas personales que llamaban mucho la atención. Cobró mucha popularidad y todo el país estaba pendiente de su aparición, fue fundado por Miguel Otero Silva, Víctor Simone de Lima, Francisco José "Kotepa" Delgado y Carlos Irazabal, contó con la colaboración de Andrés Eloy Blanco, Gabriel Bracho Montiel, Isaac Pardo, Claudio Cedeño, Aquiles Nazoa y su hermano Aníbal, entre otros.
Luis Pastori se casó con Beatriz Mendoza Sagarzazu y el día la boda, sus compañeros del Morrocoy Azul le publicaron una nota que contenía: “Hoy se casa nuestro dilecto amigo y fino poeta Luis Pastori con una distinguida dama de la sociedad valenciana (Carabobo). A él no lo felicitamos porque no la conocemos a ella y a ella tampoco la felicitamos porque lo conocemos a él”. Le comenté en algún momento al poeta sobre esta nota y con su usual velocidad mental me dijo: “Si, así fue, por ello y por razones de caridad, yo no opino sobre ellos porque los conozco bastante y la caridad empieza por hablar del amigo si se va a hacer en bien, sino es preferible callar”.
El poeta iba con relativa frecuencia a Maracay a reunirse con sus homólogos con buen bautizo de escocés, a todos les gustaba y quienes aún viven les gusta "levantar el codo" de vez en cuando; claro, siempre en su justa medida. Cuando se encontraban se caían a poemas y declamaciones hasta más no poder, siempre me invitaba para acompañarlo.
Un día, con motivo del Día del Periodista, la Asamblea Legislativa de Aragua , era yo su Presidente, celebró una sesión especial en honor a la fecha y designó orador a Ramón J. Velásquez quien se hizo acompañar de unos amigos, entre ellos estaba Luis Pastori. Mientras esperaban el inicio de la sesión, mi secretaria les ofreció algo de tomar: fresco, te, café, agua etc; el poeta dijo, para mí con soda y poco hielo, le dije que después de la sesión lo complacíamos, fuimos a "picar" y "bajamos" un litro.
La nota que los amigos le publicaron al poeta con motivo de su matrimonio, cargada de fino humor, encierra una gran verdad: Si no lo conoces (prójimo, situación o cosa) lo mejor es no opinar.
A propósito de opinar, siempre es bueno hacerlo con mucho conocimiento y si es de política mayor aún, porque lo que digamos genera criterios y tienen consecuencias. En los últimos años he leído opiniones políticas de gente que parte de lo vivido en las ultimas dos décadas en nuestro país; craso error partir de allí tomando ello como praxis política. En ese tiempo lo que hemos visto es la anti política, la negación del servicio humano. No podemos atribuirle al sistema los errores cometidos por los hombres, ellos son de ellos y nada más. La política es dialogo, acuerdo y búsqueda incesante del Bien Común, no persecución, encarcelamiento y tortura hasta la muerte, tampoco es la destrucción del país.
Necesario es estudiar la historia nacional para tener buenos fundamentos para opinar y no desacreditar la política por los lamentables errores y desafueros cometidos en la dos ultimas décadas.
Luis Pastori no era en la política opinador de oficio, pero cuando hablaba era porque "tenía los pelos de la mula en las manos" como él decía; por ello su opinión fue siempre respetable. Seguro estoy que el poeta está acompañando al Padre Eterno, brindando sus exquisitos y bellos poemas y ocurrencia humorísticas.
26 de agosto 2022
ECONOMÍA DE MERCADO
Por economía de mercado se entiende un sistema en donde, respetando y en sujeción a las leyes económicas universalmente aceptadas, los precios de los bienes, servicios y cosas se determinan según la oferta y la demanda de los mismos. En este sistema, la interacción de la oferta y demanda es la que determina la cantidad y precio de equilibrio de todo lo que demandamos y por ello son la oferta y demanda las que operan como fuerzas encargadas de dirigir la producción de bienes y servicios, es decir, la oferta.
Por supuesto, el Estado no puede ni debe ser un invitado de piedra en la economía y dejar pasar y dejar hacer todo lo que se presenta, máxime ante la debilidad y mala intención humanas que conduce a la especulación, acaparamiento y búsqueda desmedida de riqueza. El Estado debe asegurar una sana competencia y evitar la concentración de poder privado (monopolios o carteles).
El origen de la economía de mercado nace en 1776 con la obra de Adam Smith “La riqueza de las naciones” donde afirma que si las personas egoístamente buscan sólo satisfacer su interés personal, existe una “mano invisible” que es el mercado que da señales claras que permiten llegar al bienestar colectivo de la sociedad.
Como en este sistema está presente el egoísmo personal que lo deforma, tiende entonces a su inestabilidad y provoca crisis, porque las decisiones personales y egoístas producen disturbios severos. La economía de mercado tiene la gran virtud de ser impersonal, por lo que las relaciones humanas no deben llegar a conflictos encarnizados y posibilitar la convivencia pacífica en sociedad.
La economía social de mercado nace en el marco del pensamiento social-cristiano, entendiendo que correctamente interpretada y manejada debe tener como base fundamental la dignidad absoluta de la persona humana.
Konrad Adenauer dijo: “Tanto mercado como sea posible y tanto Estado como sea necesario”, es una sabia expresión que informa de la necesidad de promover la iniciativa privada y de la intervención del Estado solo para poner las cosas en orden en función del Bien Común y evitar intereses egoístas con ansias de riqueza rápida y fácil que conduce a la cruel especulación, acaparamiento y monopolio. La economía de mercado entraña competencia leal y por ello el Estado debe estimular la oferta de bienes y servicios que la demanda va graduando y nunca competir deslealmente contra la iniciativa privada.
Un régimen como el que tenemos, que no respeta las leyes económicas, por ignorancia o por maldad, conduce al país al desastre como el que tenemos. Un régimen interventor y regulador por ocurrencia alocada, como el que tenemos, es contrario a un buen desenvolvimiento económico y por eso estamos como estamos.
25 de agosto 2022
LA HIPERMNESIA
La hipermnesia es una serie de momentos graduales en la recepción de información de la memoria que se producen a través de ensayos repetidos de recuerdos y después de una sola fase de aprendizaje. En sujetos con niveles intelectuales altos puede darse un aumento de la capacidad para recordar, también puede darse ese aumento para evocar recuerdos maníacos. Son pocas las personas en el mundo en quienes opera esta recepción. Recordar el pasado nos ayuda a saber de dónde venimos y acumula sabiduría en forma de experiencia. El problema surge cuando un recuerdo se convierte en obsesión, en algo que te impide ser feliz y estar tranquilo contigo mismo.
Existe la hipermnesia afectiva que afecta a una persona que recuerda y vive con mucha intensidad únicamente lo negativo de la vida o de su vida, le resulta difícil enfocarse en lo bueno y positivo. No es que le guste estar triste, es un proceso cerebral involuntario. Hay personas que tienen como hábito mental involuntario despertarse maldiciendo y quejándose de todo. Debemos hacer lo posible para tener una buena e higiénica salud mental y ello pasa por no acumular y menos recordar momentos ingratos.
En nuestro país todos sufrimos una situación nada alentadora, más bien perjudicial, pero no podemos entregarnos y hundirnos en el malestar porque ello termina inutilizándonos y haciéndonos torpes y en el peor de los casos con una depresión altamente peligrosa. La vida tiene sinsabores, pero también cosas agradables y felices que deben provocarnos alegría, tratemos de mantener en la mente los ratos de felicidad y desechar los desagradables. Con buena salud y sanidad mental todo lo que deseamos racionalmente se puede alcanzar. Sé que a lo mejor la salud promedio del pueblo venezolano está afectada negativamente por la desgracia del régimen que tenemos, pero la mente mueve montañas.
Si queremos que este régimen no nos doblegue, lo primero que debemos hacer es tener disposición mental cargada de esperanza, fe y optimismo que apuntalen nuestra voluntad para seguir adelante con firmeza y confianza en un porvenir próximo mucho mejor.
El régimen, mediante el laboratorio macabro que tiene montado, que opera todos los días y todo el día, pretende penetrar en nuestras mentes para cambiarnos y hacernos dependientes incondicionales suyos y lo hace mediante una permanente ráfaga de mensajes que no vemos pero llegan. Estemos muy atentos para que no nos enfermen también la mente.
24 de agosto 2022